Un nuevo siglo cargado de esperanza

La llegada del siglo XXI coincidió con un crecimiento exponencial del anarcosindicalismo y la conflictividad

 Todo comenzó en Tomares, una pequeña localidad sevillana en la que seis trabajadores a liados al sindicato, encargados de la recogida de basuras, se declararon en huelga. Tras más de un centenar de días -varios de ellos en huelga de hambre- y con la militancia confederal en las calles de todo el Estado, demostró que la CNT no sólo no era cosa del pasado sino que estaba viva y coleando.

 Sin embargo, el cambio de siglo trajo aires nuevos en donde los sectores reivindicativos irían adquiriendo poco a poco mayor protagonismo. A nivel internacional las protestas antiglobalización durante las cumbres del G-8 cada vez adquirirían mayor protagonismo —en el recuerdo queda el asesinato de Carlo Giuliani o la huelga de hambre de los siete de Salónica—. Con el tiempo se demostrarían los montajes y la represión brutal contra los manifestantes en estas y otras contracumbres. Y sin duda en el Estado español la represión sería una de las características del Gobierno de Aznar, no sólo al movimiento libertario –se dice que era una de sus principales obsesiones-, también a todo el entramado de izquierdas, especialmente en el ámbito de Euskadi, donde para el PP `todo es ETA ́, de ahí entre otras medidas la Ley de Partidos.
Otras cuestiones que el periódico abordaría serían la huelga del 20-J, las campañas del sindicato contra las reformas educativas (LOCE, LOE), la Constitución Europea, la Ley de Extranjería, la catástrofe del Prestige, la guerra de Iraq y el asesinato de José Couso, las reformas laborales del PSOE, los sucesos del 11S y el 11M... todo ello dentro un periódico con un estilo renovado y más acorde a los tiempos que se vivían.
 Resulta interesante ojear los archivos periodísticos para constatar cómo ciertas cuestiones se suceden de forma cíclica en el tiempo de forma casi idéntica. Por ejemplo, los incendios que año tras año asolan a la península por falta de medios e intereses ocultos, los sucesos como el dePuertollano, Burgos o el accidente ferroviario de Chinchilla que recuerda y mucho al reciente en Angrois y cómo detrás de todos estos `accidentes  ́ se podrían haber evitado si los recortes en el mantenimiento e inversión de infraestructuras y seguridad no estuvieran a la orden del día.La famosa trama de los ERE ́s en Andalucía también evoca al escándalo que en 2002 salpicó a patronal, CC.OO. y UGT al descubrirse el fraude masivo y continuado en el tiempo en la formación de los trabajadores.

 El CNT no sólo cambiaría de imagen, también de enfoque, siendo el más importante que las noticias sindicales pasaron a ocupar las primeras páginas del periódico, acorde a la cada vez mayor actividad de la Confederación. Las huelgas en Codex, Aussa, Clece, Metro de Madrid y especialmente Mercadona —en donde se puso en jaque a uno de los grandes de la economía española y protagonizando la huelga más larga en la historia de Cataluña— conformarían esa trayectoria ascendente del sindicato, pequeño pero consolidado

Extraido del periódico "CNT". Número 404. Octubre'13. 
http://www.cnt.es/sites/default/files/cnt%20404%20web%20ok%20opti.pdf

Campaña en el Ramo de la Intervención Social

Hola a todo/as;

Desde el Sindicato os comunicamos que debido al número de consultas laborales provinientes de trabajadore/as del sector de la intervención social, hemos decidido comenzar una campaña de información laboral y sindical para todo/as los trabajadore/as que quieran conocer sus derechos y lo que es más importante, defenderlos y defenderse en el puesto de trabajo.

Nuestra intención es el de dar a conocer en primer lugar las causas que pueden protegerte y blindarte ante un despido y que hacer en caso de que se produzca un despido, para posteriormente, siempre que los propios trabajadores del ramo lo crean preciso y se involucren, profundizar en los derechos que deben disfrutar los trabajadores de la intervención social, a través de los respectivos convenios colectivos y del propio Estatuto de los Trabajadore/as.


Este sector es muy amplio y va desde trabajadores del servicio de atención domiciliaria, hasta personal de escuelas especiales, residencias de la 3ª edad y Centros de Día, pasando por empleados de los servicios sociales de la Administración o asalariados de ONG's y Fundaciones asistenciales, entre otros.

Por lo que si estás interesado/a ponte en contacto con nosotro/as.

Recibid un saludo.
Atentamente,
Secretaría de Acción Sindical

Por el resurgir de la conciencia de clase

Los sindicatos de la CNT tenemos el compromiso de hacer frente a los graves y continuos ataques del sistema capitalista. Es nuestra obligación como herramientas de lucha de los trabajadores unir fuerzas para poner freno y luchar contra la pérdida de derechos laborales y sociales, y responder al empeoramiento de las condiciones de vida de la clase obrera.

Aquí y ahora, expresamos de forma clara nuestros planteamientos:

En relación a las instituciones antiobreras 
Manifestamos que ni la clase política ni sus partidos solucionarán los problemas de los trabajadores, ya que sólo son unos títeres corruptos al servicio de la banca y las grandes empresas. Los trabajadores debemos volver a luchar, como hemos hecho siempre que hemos pretendido alcanzar respeto, mejoras de vida y derechos para nuestra clase social. El camino es la lucha (sectorial, social, en los barrios, en los pueblos...). Hay que poner en marcha una de nuestras mejores herramientas de respuesta, la huelga general real, y no repetir escenificaciones de cara a la galería para cubrir el expediente.

Nos oponemos a todas las directrices económicas, políticas y sociales emanadas del FMI, la Troika y la Unión Europea, que hacen pagar a los trabajadores las consecuencias de la crisis que el sistema económico y financiero ha provocado. Los gobiernos y parlamentos nacionales se escudan en las altas instituciones internacionales para imponer todo tipo de medidas antiobreras y represivas, eludiendo así su responsabilidad directa. Sus "soluciones" se aplican a costa de nuestra explotación y sufrimiento, condenándonos a nosotros y a nuestros hijos a un futuro incierto, negro e injusto, mientras aseguran el de las élites políticas y financieras. Están robando la riqueza que generamos los trabajadores en el presente y su avaricia es de tal magnitud que han endeudado y condenan a las generaciones futuras a condiciones de vida contra las que debemos rebelarnos.

Rechazamos las estructuras militares al servicio del capital y los estados, que enfrentan y dividen a los pueblos para mantener el control sobre la materia prima y los recursos energéticos, en sus guerras por la hegemonía económica, sin importarles lo más mínimo la barbarie y el dolor que provocan.

Denunciamos los privilegios económicos, fiscales, laborales o de estamento social de la Iglesia Católica y el resto de confesiones, la clase política, la monarquía y los militares.

En relación a la organización de los trabajadores para la lucha 
Expresamos nuestro respeto y reconocimiento a los trabajadores afiliados a CCOO y UGT que aún conservan su conciencia de clase; es decir, a sus bases. Pero a pesar de ser este un manifiesto que llama a los trabajadores a hacer frente común en la lucha, no por ello vamos a dejar de decir bien alto y bien claro que mostramos nuestro rechazo y repulsa a los pactos que, a espaldas de los trabajadores y sus intereses, firman y negocian las cúpulas dirigentes de CCOO y UGT. También condenamos sus prácticas traicioneras y desmovilizadoras, que pretenden controlar o acabar con otras luchas sociales y sindicales legítimas y autónomas.

Denunciamos la trayectoria de CCOO y UGT, que demuestra sin ningún género de dudas que actúan como instrumentos del sistema, movidos por sus propios intereses: subvenciones, favoritismo, clientelismo... y un sinfín de actuaciones que nada tienen que ver con la defensa de los derechos de los trabajadores. Se han convertido hace tiempo en cómplices necesarios y gestores del sistema a la hora de controlar, vender y utilizar a la clase obrera, arrogándose su representación, legitimados por los gobiernos y la patronal como interlocutores "legales y democráticos" para permitir al capital expoliar al pueblo y desmontar las conquistas obreras que tanto les costó alcanzar a los trabajadores que nos precedieron.

Por tanto, hacemos un llamamiento a todos los trabajadores que conforman estas organizaciones a que las abandonen y no sigan ni sosteniendo ni apoyando a quienes de forma constante traicionan no solo a sus bases sino a toda su clase. Les pedimos que no se retiren de la lucha, sino que, como personas libres y conscientes, se autoorganicen o se integren en otras organizaciones obreras.

La historia reciente, desde los Pactos de la Moncloa, nos demuestra que la participación en el modelo sindical oficial basado en la delegación del poder y la responsabilidad de los trabajadores en representantes a través de elecciones sindicales sólo debilita a la clase obrera. Los cauces establecidos del sistema de representación unitaria en los comités de empresa se convierten en una escenificación controlada que imposibilita la acción sindical, que solo puede ser real si parte de los propios trabajadores.

La CNT afirma que sólo puede ser calificada como sindicato una organización obrera autónoma; es decir, sostenida económicamente y gestionada por los propios trabajadores. Sólo un sindicalismo de clase sin injerencias políticas ni corporativismos puede proporcionar una unidad de acción y una respuesta global con capacidad transformadora.

Apoyo a las luchas sociales, desde el respeto y el reconocimiento a quienes las protagonizan 
Desde CNT hacemos un llamamiento a todas las personas de clase trabajadora, en activo, parados, precarios, jubilados, inmigrantes, estudiantes, desahuciados, etc, en definitiva, a todas las personas que sufrimos las injustas consecuencias del capitalismo, a enfrentarse a aquellos que nos oprimen.

Es necesario que todos hagamos un esfuerzo de solidaridad sumándonos a los actos de protesta que se sucederán en todo el estado durante los próximos meses en defensa de la educación, la sanidad, las pensiones, el derecho al aborto, y en definitiva de nuestra libertad y nuestras condiciones de vida. Paremos el expolio de nuestros derechos y acabemos con sus privilegios. En la lucha es donde debemos encontrarnos todos para responder como clase obrera a los graves ataques del capitalismo. Es el momento de confluir en las calles para entre todos fortalecer las luchas y así de una vez por todas hacerles ver al Capital y al Estado que no les va a ser sencillo seguir arrebatándonos derechos sociales y laborales.

Por el resurgir de la conciencia de clase
Los sindicatos de la CNT nos oponemos y denunciamos todas las injustas medidas que este sistema social nos impone, pero somos conscientes de que, a día de hoy, como organización no podemos enfrentarlas solos y sin apoyos. Nuestras causas de lucha son las de nuestra clase social. Tan solo la clase trabajadora unida podrá defender y conservar todo aquello que nos es necesario y común. La guerra de clases nunca ha desaparecido: debemos defendernos y pasar al contraataque. Las personas que conformamos la CNT estamos dispuestas y en lucha, pero necesitamos de nuestros hermanos y hermanas de clase que deis un paso al frente y que vuestra responsabilidad individual se convierta en confrontación colectiva.

¡Que se alce la protesta y se extienda la revuelta!